El desarrollo del Core permite tener un centro fuerte, lo que es necesario para cualquier movimiento, ayudando a tener más estabilidad y control. Su énfasis en la respiración ayuda a oxigenar el cuerpo, mejorando la resistencia, la propiocepción y control motor. Además los deportistas tienen generalmente tiempos limitados, entonces Pilates es ideal por cuanto una ve máximos resultados con unas pocas repeticiones de distintos movimientos que permiten fortalecer y flexibilizar, desarrollándose al mismo tiempo una sensación de vigor tanto físico como mental.
Los beneficios de integrar Pilates a un entrenamiento deportivo son enormes. Esta técnica desarrolla una base de fuerza y flexibilidad que crea un cuerpo más equilibrado, corrigiéndose los desequilibrios musculares provocados por el entrenamiento asimétrico de algunos deportes.